viernes, 9 de diciembre de 2011

"LO QUE EL VIENTO SE LLEVÓ"


La PELÍCULA por excelencia.
Desde pequeñito se ha visto esta película una y mil veces en mi casa y mi/nuestra adoración, hablo por los míos porque lo sé muy bien, no mengua ni un ápice. Un mito.

Imposible de explicar con palabras lo que es esta obra maestra del arte. Lo intentaré a mi manera, como siempre, claro.

Esta película fue concebida como el mayor espectáculo cinematográfico de todos los tiempos. Y sus artífices, en particular los legendarios O. Selznick y Cameron Menzies, lo consiguieron sin ninguna duda. Jamás, ni en los 44 años anteriores, ni en los siguientes 72 años de historia del séptimo arte, se ha llegado a estas cotas. Solamente otro mastodóntico proyecto como fue "Ben-Hur" en el año 1959, puede igualar en grandiosidad a La Película. pero en otro tono, y en otros matices que ahora no nos ocupan. Eso sí, son mis dos superproducciones favoritas, capaces de tenerme casi cuatro horas absolutamente hipersensibilizado y estendalizado del todo. Para mí son la quintaesencia de lo que es el cine. Sin más.

Posiblemente la haya visto más de 20 veces durante toda mi vida, y sin embargo posee esa aureola que hace que te pegues a la pantalla y te enganche hasta el máximo, incluso si ya está empezada.
La historia es desgarradora y tremenda, con unos personajes perfectamente construidos y magníficamente interpretados. Frases y diálogos gloriosos. Escenarios hermosos. Es imposible hacer algo así a día de hoy. Una fotografía que resulta indescriptible en su belleza. Y esa banda sonora mítica.

Max Steiner. Uno de los compositores grandes del Hollywood clásico, sin duda. Impulsor de lo que hoy conocemos como "score" cinematográfico, con su vanguardista partitura de "King-Kong", 6 años antes. La música creada para "Lo que el viento se llevó" contribuye plenamente en darle esa grandiosidad al film. "Leitmotivs" y temas tremendos. El principal es y será siempre uno de los más reconocidos del cine, justamente, aunque mi debilidad está en el tema de Melania, perfectamente audible en la escena de la vuelta a casa de Ashley.
Como curiosidad, esta banda sonora fue el primer vinilo que compré en mi vida. Me costó, creo, 1000 ó 1200 de las antiguas pesetas en "El Corte Inglés", y es la magnífica versión orquestada por Charles Gerhardt. Sería el año 88 u 89 por ahí...

Los actores. Maravillosos. Clark Gable es un mito absoluto en general, pero su Rhett Butler lo es en particular. Y qué decir de Vivian Leight... La interpretación femenina más espectacular y con más fuerza de la historia. Jamás nadie logrará un papel así, y jamás nadie se acercará a una actuación así. Además su belleza es indescriptible; hay escenas en que directamente traspasa la pantalla con su rostro. Esos ojos... Los "secundarios" son excelentes, con una Mammy, un Ashley y una Melania deliciosos. Nada ni nadie desentona. nada ni nadie sobra.

Las escenas. Hablar de escenas en particular resulta complicado, pues desde que empieza hasta que acaba asistimos a un mito detrás de otro. Esas chispas que saltan entre Rhett y Escarlata, que se encargan de destrozarse mutuamente, sobretodo ella... Esas secuencias tan íntimas entre Rhett y Melita, de una delicadeza extrema. Esos lamentos de Ashley... Esa Mammy... Esa estación en guerra... Ese incendio de Atlanta... Esos atardeceres de juramentos... Ese comienzo en "Los doce robles"... "Tara"..........
Buah, es inútil. Es Toda la película una secuencia hermosa en sí misma.

Y el amor. Esa Escarlata caprichosa y niñata con el amor. Que ama a Rhett sin que lo vea, sin querer verlo, y sin hacérselo ver a él... Él, que la adora ciegamente por su fuerza, por su carácter, por su valor, por su personalidad... Un hombre que podría tener a cualquiera, igual que ella. El capricho de Ashley, que siempre nada en la ambigüedad delante de Escarlata, pero que ama sin dudarlo a Melita, comprensiva y buena... Un dramón... Sobretodo hay 5 ó 10 minutos casi al final, que se suceden los accidentes y las muertes, que son la tragedia total...

Y, bueno, todos los que amamos esta película tenemos nuestra propia interpretación de ese final antológico, supongo. Cuando Rhett abandona a Escarlata y ella desconsolada se levanta de esas escaleras diciendo que volverá a su casa y que su amado volverá a ella....
Sí, yo creo que sí, que volverán a estar juntos. Sin más. Su pasión es inmarchitable. Y aunque tarde, ella se da cuenta de lo mucho que le quiere. Rhett está cansado, pero volverá y dará a Escarlata esa última oportunidad de encontrar la felicidad juntos, incluso sin la pobre Bonnie. Una historia tan épica y unos personajes tan tremendos no se merecen otro final que el de que estén juntos... al menos es lo que siempre he pensado desde la primera vez que la vi.

En fin, LA PELÍCULA, sin duda. Y la seguiré viendo como si no hubiera mañana, con los pelos como escarpias y con el corazón en un puño. Especial, muy especial...

10/10

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